Más libertad para vivir y habitar
Para ello lo mejor es un estilo ordenado: las líneas claras, tonos cálidos y superficies variadas forman la base de este conjunto concept130 MONTREAL-GL roble fino luminoso. Junto con su elemento de contraste en grafito, el tono roble fino luminoso logra un look moderno y al mismo tiempo natural. El contrastado juego de texturas y colores se completa con brillantes baldosas grises tipo metro, revestimientos claros de suelo y acogedoras sillas tapizadas en verde, que evocan el exuberante verde del follaje en julio: un homenaje a la naturaleza... ¡en su casa!
Un juego natural de colores
Esta variante de cocina concept130 crea un juego de colores que recrea la naturaleza. Musgos, troncos de árboles, piedra: colores como el marrón claro, el verde intenso y el misterioso antracita evocan el escenario natural del bosque. Todos juntos, transmiten equilibrio, frescura y arraigo. Unos valores que a menudo faltan en la agitada vida cotidiana. Una cocina con esta combinación de colores crea así un ambiente acogedor, en el que de inmediato nos sentimos acogidos y en el hogar. El concepto de colores contrastados se completa con distintos tactos, texturas y armarios abiertos en lugares concretos, con espacio para utensilios de cocina muy bonitos y para su mejor vajilla.
De un mismo molde
Parecido, pero no idéntico. Lo mejor para acertar en temas de estilo es usar un concepto general muy uniforme para el diseño interior. Eso no significa que no puedan mezclarse diferentes estilos y colores. Se trata más bien de que todos los elementos juntos armonicen bien. Un objetivo muy fácil si se combina una cocina Häcker de la línea concept130 con otros elementos de mobiliario de la misma serie de productos. Häcker se lo pone fácil a sus clientes, porque en concept130 hay aparadores y roperos que armonizan perfectamente con el resto del interior. Como este aparador flotante con superficie de color grafito y puertas de cristal con marco que dejan ver sus piezas favoritas. El resultado: espacios de vivienda con estilo uniforme.
Estética flotante
Guardar. Presentar. Lucir. El aparador, que casi flota en el aire, es uno de los favoritos de cualquier decoración de interiores. Se usa para lograr espacio de almacenamiento adicional y una superficie de presentación decorativa en interiores. Se monta en la pared para ahorrar espacio y se usa para mostrar con estilo lámparas, objetos decorativos, marcos con fotos u otros elementos pequeños. En sus compartimentos se pueden tener distintos objetos a mano, de servicios selectos a libros ilustrados o figuras de arcilla. Las puertas de los armarios son de cristal y permiten así ver el valioso contenido. Sugerencia: los frentes en antracita intensa hacen que queden muy bien los variados elementos decorativos en el aparador y sobre el mismo.
El remate funcional: un ropero en grafito
¿Qué hace que un ropero sea excelente? Dispone de suficiente espacio de almacenamiento y puede ajustarse del todo a sus ideas y necesidades: de la altura y anchura al número de elementos abiertos y cerrados, pasando por el frontal. ¡Con nosotros tendrá plena libertad de diseño!
El ropero que se muestra aquí da un bonito ejemplo de un posible uso. En un lado, presenta una zona con un perchero y dos estantes abiertos. En el otro, los armarios cerrados en color grafito dan espacio suficiente para guardar muchas cosas, de gorras, sombreros o bufandas a paraguas. Con su diseño minimalista y su sutil colorido, el ropero no se impone en primer plano, más bien queda como un elegante elemento del mobiliario doméstico. Los tiradores, apenas visibles, son del mismo color. Las superficies lisas refuerzan el diseño purista.
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